Marido por unas horas by Susan Mallery

Marido por unas horas by Susan Mallery

autor:Susan Mallery
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Romántico, Novela
publicado: 2015-05-18T06:00:00+00:00


Capítulo 8

Hannah se sintió como si fuera una niña castigada a ir al despacho del director del colegio. Al entrar en el salón a la mañana siguiente, se encontró con sus cuatro hermanos y Louise esperándola.

Tragó saliva, temiendo que hubieran averiguado su mentira respecto a Nick. Quizá fuera mejor contárselo todo en ese mismo momento.

Craig la vio primero, se levantó y le hizo una seña para que se sentara.

–No te asustes –dijo Craig y la acompañó al sofá, donde estaban Louise y Travis–. No somos la Inquisición. Esperábamos que tuvieras algunas preguntas sobre lo que pasó en el pasado. Hablar de esas cosas puede ser difícil al principio, pero a la larga es mejor. Hemos guardado demasiados secretos y no queremos tener ninguno contigo. Eres nuestra hermana.

Hannah se quedó mirándolo a los ojos. Tenían el mismo color que los suyos propios. Era un hombre alto y guapo, con una cálida sonrisa. ¿Cómo habría sido crecer con Craig como hermano mayor? Seguro que habría sido maravilloso…

–Yo… ¿No es por Nick?

–¿Nick? –preguntó Louise–. No. Pero, si te sientes más cómoda si te acompaña, lo entendemos.

Hannah meneó la cabeza. Era obvio que no querían enfrentarse a ella por la mentira sobre su matrimonio.

–No es necesario. Creo que podré manejarme sola.

–Siéntate –indicó Craig de nuevo.

Hannah se colocó entre su madre y Travis. Kyle y Jordan estaban en unas sillas frente a ellos y Craig en el sillón vecino.

–No estoy seguro de por dónde empezar –dijo Craig.

–Déjame a mí –pidió la mujer mayor y se volvió a su hija–. Earl, tu padre, no sabe que existes.

–¿Por qué? –preguntó Hannah, un poco decepcionada.

–No nos hablamos desde hace años. Desde antes de que se jubilara y se mudara a Florida –explicó Louise con gesto de preocupación–. Yo no estaba segura de qué contarle. Tú habrías… complicado las cosas. Sé que ha sido egoísta por mi parte.

Hannah se quedó mirándola largo rato. Luego, tornó la mirada hacia cada uno de sus hermanos. Todos tenían la cabeza gacha.

Durante un momento, se preguntó qué le estarían ocultando. Hasta que comprendió de pronto.

–Creéis que no le voy a importar.

–Eso no es verdad –se apresuró a negar Louise.

–Louise, ya hablamos de esto antes de que escribieras a Hannah –intervino Craig.

–Lo sé –murmuró Louise y se aclaró la garganta–. No estoy segura de qué pensaría Earl de ti. No quiero que te haga daño. No es un hombre muy delicado.

En ese momento, cuando vio que le estaban negando la oportunidad de reunirse con su padre, Hannah se dio cuenta de lo mucho que ansiaba conocerlo.

–Todos pensamos que era mejor esperar –prosiguió Travis–. Queríamos darte un par de semanas para hacerte a la idea de todo. Cuando estés preparada para contactar con Earl, te daremos su número te teléfono y te allanaremos el camino.

–Yo puedo llamarle por ti, si quieres –se ofreció Louise.

–Estoy abrumada –confesó Hannah–. Hasta ahora, no había pensado en ponerme en contacto con él. No sé qué pensar – admitió y le tocó la mano a su madre–. Tú lo querías.

–Eso fue hace mucho tiempo.



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.